¿Les gusta la navidad a nuestras mascotas?
11/12/2019
La Navidad puede estresar a nuestras mascotas.
Porque el hecho de llevarle de viaje, de recibir en casa otros animales o de darle de comer fuera de su dieta son factores que, lejos de lo que creemos, les causan estrés. Uno que, en gran medida, podemos paliar simplemente sabiendo algunas cosas.
Nuestros compañeros animales, esos que nos acompañan todo el año, también forma parte de estas fiestas. Durante la Navidad, las mascotas nos acompañan como parte inherente de nuestra familia. Sin embargo, este hecho no significa que disfruten de ellas como lo hacemos nosotros y, precisamente por eso, tenemos que tener en cuenta algunos factores importantes para su salud y su bienestar.
EL VIAJE, UN MOTIVO DE NERVIOS
El hecho de hacer un viaje con nuestro perro o gato (sobre todo con éstos últimos) es un momento delicado para ellos. No solo porque tener que hacerlo en un transportin limita mucho su espacio y, por tanto, les genera cierto nerviosismo sino también por lo que supone en sí.
Darle a nuestro perro un pequeño descanso durante el viaje ayudará a paliar su estrés
Como en otras ocasiones, recomendamos que el trayecto cuente con algunas paradas para revisar el estado de nuestra mascota e, incluso, para que pueda dar un pequeño paseo. Unos minutos fuera del transportin que no solo le oxigenarán sino que, además, le darán la oportunidad de estar con su familia y de normalizar lo que implica estar encerrado durante un rato.
Por eso, es importante ahora en Navidad revisar que ese habitáculo en el que tiene que viajar está en perfecto estado e, incluso, que cuenta con lo necesario (como un bebedero, para que la calefacción del coche o el calor que hace dentro de él no pongan en riesgo su salud).
LAS VISITAS, ALGO PARA DISFRUTAR
Para muchas mascotas, la Navidad es ese momento del año en el que hay demasiado ruido y demasiada gente. Algunas mascotas, como los gatos y ciertos perros, son especialmente susceptibles a los cambios y, dentro de esos cambios, se incluye la gente. Es importante que, a pesar de los momentos sociales propios de la Navidad, nuestras mascotas continúen teniendo su propio espacio. Algo que les evitará estar nerviosos y que, incluso, dará la opción de que socialicen con nuestras visitas.
Si, además, durante la Navidad nuestras mascotas van a entrar en contacto con otras mascotas también es importante prepararles. Dado que esto habitualmente se da entre perros, es importante que el nuestro esté preparado para recibir una visita. Por eso, os recomendamos que antes de su llegada demos un buen paseo con él, le ayudemos a desfogar energía y compartamos un rato con él para que no se sienta desplazado.
LOS PEQUEÑOS PLACERES, UN GRAN PROBLEMA
A pesar de que creemos que es muy bueno involucrar a nuestras mascotas con la Navidad dándoles pequeños manjares a comer, nada más lejos de la realidad. Esos «trocitos» que parecen inofensivos pueden crearles graves problemas estomacales.
Lo que puede ser «darle un capricho» puede convertirse en un disgusto
Así, tendremos que desterrar especialmente la idea de darles uvas, turrón, roscón de Reyes y alcohol si no queremos que nuestra Nochebuena o Nochevieja acabe en el veterinario. Añadido, el hecho de que coma lo mismo que nosotros puede suponerle graves problemas estomacales.
LOS JUGUETES, UN REMEDIO CONTRA EL ESTRÉS
Las luces, los adornos (cuidado con ellos también), la gente, la pirotecnia… y todo el resto de actividades y elementos propios de las fiestas pueden ser un estrés añadido para nuestras mascotas en Navidad.
Por eso y con vistas a paliar un poco esa ansiedad que les puede suponer salir de la rutina, es más que recomendable plantearnos regalarle un juguete. Uno que le haga entretenerse y tener su momento de calma, ajeno a todo lo que sucede alrededor, y un cierto espacio más allá de las reuniones familiares o, incluso, de los espacios nuevos.
Descubrir un juguete nuevo puede ayudar a las mascotas a paliar el estrés propio de la Navidad
Por último, un consejo importante: darles mucho cariño. Una medicina perfecta para que la Navidad no se convierta en un mal momento para nuestras mascotas y para nosotros.